Eduardo Risso (Argentina, 1959) es uno de los mejores dibujantes del mundo y una de las actuales estrellas del cómic norteamericano gracias a su trabajo en la serie 100 balas junto al guionista Brian Azzarello, una colaboración de diez años que les valió nada menos que cuatro premios Eisner, los más importantes del mundo del cómic: Mejor Historia Serializada (2001); Mejor Artista (2002) y Mejor Serie Regular (2002 y 2004).
El argentino ha venido ha venido a Expocómic para presentar la reedición de 100 balas (ecc ediciones) una serie que partía de una interesante premisa, personajes anónimos eran abordados por unos misteriosos hombres de negro que les daban un maletín con un montón de dinero y una pistola con cien balas que no se podían rastrear de ninguna manera. Tenían total impunidad para hacer lo que quisieran con ellas y comenzar una nueva vida.
Risso nos ha anunciado que está trabajando en un spin-off de la misma junto a Azzarello: “Se trata de una miniserie de ocho números llamada Brother Lono (DC), protagonizada por uno de los personajes supervivientes del final de la serie, y que transcurre inmediatamente después de los hechos narrados en100 balas”.
“Llegué a ‘100 balas’ por casualidad”
Viendo los primeros números de la serie (de 2001), Risso asegura que: “Confieso que los re-dibujaría, más allá de la historia que sigue teniendo un argumento muy sólido y unos guiones muy inteligentes me gustaría cambiar muchas cosas. Pero me pasa con casi todos mis trabajos, en cuanto los termino. Afortunadamente no tengo tiempo para volver atrás ni pensar demasiado sobre ello".
“Llegué al proyecto por casualidad –nos cuenta Risso-,por pura suerte. A quién le gustaba mi trabajo era aAxel Alonso, que era el editor del sello Vértigo de Dc Comics y el que sacó adelante el proyecto de 100 balas. Azzarello ya le había vendido el proyecto a DC y necesitaban un dibujante”.
“Por aquel entonces no existía el computador, se mandaban las cosas por fax y Alonso tenía tres artistas para pasarle a Brian desde Nueva York a Chicago y tuve la suerte de que mis páginas de muestra fueron las primeras que envío. En cuanto Brian las recibió levantó el tubo y dijo: ”No me pases ningún otro, este es el dibujante que me gusta”. Nunca he sabido quiénes eran los otros dos candidatos para dibujar la serie, ni lo quise saber”.
“Cuando empezamos, DC nos dejó muy claro que el proyecto solo iba a continuar si vendía, lo que nos motivó a ambos para ponerle más energía y que el cómic saliera adelante. Y en un momento me senté con Azzarello a planificar la serie y dijimos “como se llama100 balas debería terminar en el número 100. Y así lo decidimos”.
“Confieso que cuando llegó ese número 100 estaba deseando terminar, porque diez años es mucho tiempo, más allá de que lo disfruté muchísimo, algunas sagas más que otras. Y además, 100 balas me ha dado la posibilidad de afianzar mi estilo”.
Uno de los grandes dibujantes argentinos
Antes de trabajar con Azarello, Risso ya era una gran estrella en Argentina y España gracias a sus colaboraciones con grandes guionistas, sobre todo el añoradoCarlos Trillo (Fulú, Simón, Chicanos) “No creo que haya mucha diferencia en mis colaboraciones con Trillo y Azarello –asegura Risso-. He tenido la suerte de formar equipo con dos de los mejores guionistas de la historia y me he compenetrado con ambos de forma que cuando el guión flojeaba en alguna escena yo le daba más importancia a la parte gráfica para que la línea del proyecto, la emoción de la historia, se mantuviese y no decayera. Es una retroalimentación entre guionista y dibujante”.
“Con cada guionista que he trabajado procuré dejarle claro que podía confiar en mi arte para contar muchas cosas en las páginas. Para que dejaran la dirección del arte en mis manos y que ellos se centraran en escribir el argumento y los diálogos. Y creo que ese sistema de trabajo ha dado excelentes resultados”.
“'ET', de Spielberg, es una de mis mayores influencias”
Risso esta considerado uno de los mejores narradores del cómic actual por su estupendo diseño de las páginas, algo que el dibujante confiesa que le viene del cine: “El cine es lo que más me interesa y me influye, más que cualquier otro arte. Esto es narración gráfica y ambos artes van de la mano, aunque en el cómic tenemos más espacio y es mucho más barato. Pero creo que lo más importante de un cómic es que la narración se entienda incluso sin el apoyo de los textos, eso es fundamental”.
“Y confieso que una de las película que más me ha influido en mi forma de narrar y dibujar, es ET, de Spielberg. Esos diez primeros minutos de la película, de noche, en el bosque, en el que no sabemos lo que pasa, ni quienes son los que llevan las linternas, ni que están buscando… Y aunque sea de noche y el montaje sea muy rápido, Spielberg consigue que vayamos identificando perfectamente a esas sombras, sabemos que uno es de la CIA, el otro policía, de la Nasa... nunca da detalles, pero nos da las suficientes pistas para que pensemos y deduzcamos lo que está pasando”
“Y eso es fundamental, que el espectador o el lector se involucre y participe en lo que está pasando. Es lo que me pasaba a mi cuando leía cómics de joven, que entraba en la aventura y trataba de ser ese personaje. Y me pasa en todo tipo de lectura, me imaginaba en el lugar del personaje”.
"Batman es el único superhéore que me creo"
Además del Spin-Off de 100 balas, Risso asegura que también “Trabajo en un proyecto sobre Batman con el guionista y dibujante Paul Dini (responsable de la famosa serie de animación del personaje). Es un proyecto muy interesante y con varios villanos. Batman es el superhéroe con el que más he trabajado porque es el único que me creo, no me creo a los demás. Supongo que tiene que ver con que no los leí de pequeño y no tengo compatibilidad con ellos. Por eso, dibujar a Superman, por ejemplo, puede ser un gran desafío para mí”.
Risso confiesa que le encanta viajar y acudir a los salones de cómic para poder charlar con los aficionados y que por eso ha sido uno de los creadores de Crack Bang Boom, una de las citas más importantes en Argentina: “Creo que es muy importante hablar con los lectores y saber lo que opinan de nuestro trabajo y para captar a otros nuevos. Por eso organizo ese salón en colaboración con el ayuntamiento de mi ciudad, para difundir este género. El Cómic Argentina se mantiene vivo. Hemos perdido a las grandes editoriales, pero hay muchas pequeñas que publican un montón de títulos, el problema es que no tenemos tantos lectores y hay que empezar a captarlos. Y creo que una de las formas puede ser a través de este tipo de eventos”.
Preguntamos a Risso qué haría si le dieran un maletín con un montón de dinero y una pisto con cien balas que no se pueden rastrear (el punto de partida de la serie): “No me lo había planteado, pero es una cuestión interesante, en Argentina se podrían hacer muchos cambios" –Bromea-.
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