domingo, 21 de agosto de 2016

Las aventuras de Dieter Lumpen. Un clásico moderno




 El presente texto no ha sido realizado para esta revista; en realidad lo escribí en su versión inicial hace algunos años para la revista argentina Comiqueando. De lo que no estoy muy seguro es de si finalmente llegó a publicarse allí o no: su realización coincidió con la desaparición de la revista motivada por la profunda crisis económica que sacudió aquel país.

De modo que ahora mismo no se muy bien si apareció en el último número de Comiqueando, o si el
 dichoso corralito argentino impidió que viese la luz.

Sea como fuere, cuando Ángel me pidió un artículo sobre un clásico moderno, y tras muchas ideas demenciales, decidí recuperar este texto -actualizándolo ligeramente- como una suerte de homenaje a mi amigo Andrés Accorsi y a su revista. He decidido también respetar la estructura del texto, que era siempre la misma en la sección en la que apareció -o debía aparecer- y que llevaba por título Grandes Series Europeas.



 LOS AUTORES
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No resulta fácil determinar si los autores de Las Aventuras de Dieter Lumpen son el guionista Jorge Zentner y el dibujante Rubén Pellejero, o lo es en realidad una personalidad, genial y única, que surge cuando ambos autores unen sus fuerzas. Digo esto porque pocas veces un tándem de autores ha logrado tal compenetración como la que demuestran Jorge y Rubén.

Jorge Zentner -Basavilbaso, 1953- periodista y psicólogo, comenzó su carrera como escritor de cómics en 1979 -según cuentan, instigado por Carlos Sampayo- en colaboración con un joven dibujante catalán llamado Rubén Pellejero -Badalona 1952-.

Pellejero ya llevaba entonces un par de años trabajando como dibujante de agencia, produciendo trabajos para países como Inglaterra, Italia o Noruega, y antes de comenzar su colaboración con Zentner, ya había visto publicada en la revista Cimoc una serie llamada Historias de una Barcelona. Las aventuras de Monsieur Griffaton, realizada en 1983, e Historias en F.M., elaborada en 1984, serían los dos primeros trabajos de dúo, que en 1985 daría luz a su creación más conocida: Dieter Lumpen.






Las Aventuras de Dieter Lumpen ocuparían la actividad el tándem durante casi siete años, tras los cuales también realizarían el álbum El cautivo, dentro de la colección de libros que se editó durante la conmemoración del Quinto Centenario del descubrimiento de América; amén de diversas historias cortas con diferente destino. Posteriormente realizarían, en 1995, esa obra maestra que lleva por título El Silencio de Malka -ganadora de uno de los premios del salón de Angouleme del año 97, entre otros galardones- y un álbum recopilando historias cortas que hasta ahora solo ha visto la luz en francés. Tabú-1999- es la penúltima de sus colaboraciones editada hasta el momento, en castellano por Glenat; mientras que esa especie de viaje iniciático apresurado, en forma de dos tomos editados aquí también por Glenat-España, que es Aromm, con-forma su último trabajo conjunto.

Ambos autores también han mantenido una actividad fuera del tándem que forman desde hace veinte años. Así Pellejero ha trabajado con Denis Lapiére en el álbum Un peu de fumée blue, editado por Glenat en castellano, mientras que Zentner ha escrito en los últimos años varios guiones para autores como David Sala -Replay y Nicholas Eymerich Inquisidor editados en castellano por Astiberri-, Santos de Veracruz -Flamenco, editado por Astiberri-, Carlos Nine -La adelantada de los mares del sur, aparecido en la colección del Quinto Centenario, y Pampa, editada por Sins entido-, Bernard Olivé -Caravana, editado por Astiberri- o Lorenzo Mattotti -El cosmógrafo Sebastián Caboto, reeditado recientemente por Glenat-España, y El rumor de la escarcha, editado por Planeta-.


LA SAGA ••••••••••••••••
Dieter Lumpen es un individuo sin oficio, ni beneficio cuya principal cualidad viene a ser una innata facilidad para viajar alrededor de todo el mundo y meterse en líos allá donde va. Sus creadores nunca han fijado de forma clara cuál es la época en la que se desarrollan las andanzas de Lumpen, si bien parece estar situada cerca de la mitad del siglo pasado. Lumpen, tan pronto se emplea como chofer para todo de una vieja dama en Estambul, como debe pagar sus deudas de juego en las islas griegas; se puede ver envuelto en una madeja semi incomprensible de interés políticos y económicos en Túnez con la misma facilidad con la que es escogido para protagonizar una producción de cine norteamericana que se está filmando en el Caribe, y eso por no mencionar un viaje de Venecia a Estados Unidos pasando por la China sin otro fin que perseguir las faldas de distintas mujeres.





 Viñetas de La voz del maestro. Por Zentner y Pellejero. En la edición de Cairo n° 35. Norma editorial.


El transcurso de la serie, unido a su éxito, facilitó que los autores pudiesen ir aumentando la longitud de sus relatos con lo que los guiones de Zentner podían explorar con más intensidad el mensaje subyacente bajo la formula de aventura del relato, y posibilitaba a Pellejero una mayor capacidad de lucimiento, tanto en el desarrollo narrativo, como en la exploración de la capacidad expresiva, primero del blanco y negro y posteriormente, del color.

LOS PERSONAJES
Dieter es el absoluto protagonista de la serie. Su presencia es la única que se repite de un episodio a otro, de una aventura a otra.

No existen secundarios que le roben protagonismo en más de una ocasión. Sin embargo, y como paradoja, hasta bien avanzada la serie, Dieter no suele ser el protagonista total y directo de las historias, sino más bien el testigo privilegiado de lo que acontece a los demás.

No será hasta las dos últimas narraciones, Caribe y El precio de Caronte, cuando asuma el protagonismo absoluto de las historias.

Como personaje, Dieter es un individuo cuyo principal interés parece ser el de vivir tranquilo con el menor esfuerzo posible, pero que parece especialmente obstinado en contradecirse a sí mismo y meterse en problemas a las primeras de cambio. Sí bien la serie presenta claramente una temática de aventuras, no se puede decir que Dieter responda al perfil de aventurero; y de hecho algunas de sus actuaciones, sobre todo la de la historia El malo de la película, le confieren una moralidad más que dudosa. Esa es seguramente la peculiaridad más importante de la serie: Dieter Lumpen puede tener su nombre como cabecera de la serie, pero dista mucho de ser un héroe.








EN CASTELLANO
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La serie ha visto todos sus episodios editados en castellano, si bien el último de ellos fue producido ya originariamente para una editorial francesa y su edición en álbum, a cargo de la misma editorial.
Dos álbumes recopílatenos fueron también el resultado de estas historias cortas. Enemigos Comunes, realizada en 1986, sería la primera historia larga del personaje, que vería la luz dentro de la revista Cimoc, anteriormente a su edición en álbum. A ella, seguiría Caribe, que realizada en 1988, también sería serializada previamente en Cimoc.

Entre 1989 y 1991, Pellejero y Zentner completarían El precio de Caronte, última andanza de Lumpen hasta el momento, y la única de ellas en la que han podido salirse del esquema de páginas habitual de un álbum para irse hasta las 68 planchas. La obra apareció serializada en la revista Top Comics de Ediciones B en 1993.

Planeta reeditó la serie en 1999, en una edición en formato comic book y en blanco y negro -excepto el último álbum que apareció en color dividido en nunca ha sido editado en álbum en español. Dieter Lumpen arrancó su andadura en 1985 en la revista Cairo de Norma Editorial, a través de ocho historias cortas: las cuatro primeras de ellas realizadas en blanco y negro y posteriormente coloreadas para dos cuadernillos-. Una edición que sirvió para acercar el personaje a los lectores más jóvenes, pero que no presentaba el soporte más adecuado para disfrutar de la calidad gráfica de una de las obras esenciales del cómic realizado en castellano en las últimas décadas.





Viñeta de Bomba de tiempo. Por Zentner y Pellejero. En la edidión de Cairo n° 33. Norma editorial.


Publicado en la revista Dentro de la Viñeta nº28, año 2004.

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