sábado, 4 de mayo de 2019

Fuego contra agua

La colección, que forma parte de la celebración del 80 aniversario de Marvel, se abre con uno de los clásicos por excelencia de la editorial de los años 40



JAVIER FERNÁNDEZ
24 Abril, 2019



'Décadas. Marvel en los años 40: La Antorcha Humana contra El Hombre Submarino'. Carl Burgos, Bill Everett. Panini. 232 páginas. 24 euros.


La línea de reediciones de Marvel emprendida por Panini abarca la práctica totalidad de lo publicado desde la creación de los Cuatro Fantásticos en 1961. Así, colecciones como Marvel Gold, Marvel Héroes, Marvel Limited Edition o Marvel Saga, entre otras, vienen devolviendo a las librerías materiales de las distintas décadas de existencia de este rico universo de ficción, del que cada vez van quedando menos cosas en el olvido. Con todo, conviene recordar que el primer número de Marvel Comics, la cabecera inaugural de la compañía, se publicó originalmente en 1939, de modo que hay más de veinte años de tebeos previos al estallido artístico de Stan Lee y Jack Kirby, y este es un período al que se le ha dedicado poca atención editorial en nuestro país.

También esto ha empezado a cambiar últimamente, en un gesto que indica la insaciabilidad de los aficionados al género en el siglo XXI. Hace relativamente poco, la colección Marvel Limited Edition nos ofreció un tomo con la cabecera Amazing Fantasy, del periodo inmediatamente anterior a los Cuatro Fantásticos, y aún más reciente es el primer volumen dedicado al Capitán América original, el de Joe Simon y Jack Kirby, alumbrado nada menos que en 1941.

A estas tímidas incursiones en territorio inexplorado se suma ahora la colección Décadas, como parte de la celebración del ochenta cumpleaños de Marvel, que se abre con uno de los clásicos por excelencia de la Marvel de los años 40, los cruces argumentales entre los dos personajes principales de los varios que se presentaron en el citado Marvel Comics, la Antorcha Humana y el Hombre Submarino. El primero, que tiene la distinción de haber ocupado la portada del primer número de aquella cabecera, es un androide flamígero, nada que ver Johnny Storm, creado por Carl Burgos en los inicios mismos del género, un año después del debut de Superman. Como escribió Jim Steranko en The Steranko History of Comics, la Antorcha Humana original es "la más pura y más exclusiva manifestación del héroe de cómic. Como un arcángel en llamas, casi parece encarnar matices teológicos; su esencia se asemeja casi a la omnipotencia divina". Y parece claro que el personaje pulsó una tecla correcta, pues, a pesar del estilo tosco de Burgos, apareció en un buen montón de cabeceras y hasta adquirió la suya propia.

El Hombre Submarino, por su parte, fue obra del gran Bill Everett, y este antihéroe anfibio, un adolescente perpetuo que odia a la humanidad, es uno de los personajes más interesantes de la Edad de Oro. Steranko lo considera la versión en cómic de Madame Butterfly y nos recuerda que su nombre, Namor, es Roman al revés, así como que el término "Sub-Mariner" proviene del poema Rime of the Ancient Mariner, de Coleridge. De todos los enfrentamientos protagonizados por Namor, los más memorables son los que protagonizó con la Antorcha Humana, signo de que los personajes de Marvel (conocida como Timely en aquellos años) compartían una misma arena, eso que, dos décadas después, sería conocido como universo Marvel.


Malaga Hoy


Una mirada al futuro

JAVIER FERNÁNDEZ
24 Abril, 2019


'Marvel Saga. El asombroso Spiderman, 35: La muerte del mañana'. Dan Slott, Humberto Ramos y otros. Panini. 192 pág. 19 euros.

La muerte del mañana es el título del trigésimo quinto tomo de la colección Marvel Saga dedicado a reeditar las aventuras de Spiderman en el siglo XXI. Metidos de lleno en el trabajo del guionista Dan Slott al frente de la cabecera The Amazing Spider-Man, el presente volumen recopila los números 674 a 676 y 678 a 681 de dicha serie, publicados originalmente en 2012, con diversas aventuras entre las que destaca el díptico I Killed Twomorrow. El Hombre Araña echa un vistazo al futuro inmediato y descubre que Nueva York será destruida por su culpa, lo que le deja apenas doce horas para tratar de evitarlo. Giuseppe Camuncoli, Emma Ríos y, claro está, Humberto Ramos, acompañan a Slott en esta etapa que crece con paso firme.



Malaga Hoy


miércoles, 17 de abril de 2019

the Clash por Serge Clerc









Metal Hurlant

A las cinco de la tarde...

'La huella de Lorca' (2011), de Carlos Hernández y El Torres, es el primer cómic sobre el poeta de Granada y recoge historias reales sobre la impronta que dejó entre sus allegados


GERARDO MACÍAS
17 Abril, 2019




'La huella de Lorca'. Guión y dibujos: Carlos Hernández y El Torres. Norma Editorial, 2011.

Así lloraba Federico García Lorca la muerte de un amigo suyo, el torero Ignacio Sánchez Mejías: "Eran las cinco en punto de la tarde./ Un niño trajo la blanca sábana/a las cinco de la tarde./ Una espuerta de cal ya prevenida/a las cinco de la tarde./Lo demás era muerte y sólo muerte/a las cinco de la tarde".

También fueron muchísimas personas las que lloraron la muerte del propio poeta granadino. A través de historias reales y testimonios, en este cómic, que es el primero que se edita sobre la vida de Federico García Lorca, descubrimos la huella que dejó en quienes le conocieron. Carlos Hernández y El Torres reconstruyen la figura de Federico García Lorca a través de los ojos de quienes compartieron su vida y su muerte.

La vida de Federico García Lorca y su muerte han sido retratadas de muy diversas formas y perspectivas, de ahí el interés del dibujante granadino, Carlos Hernández, y el guionista malagueño, El Torres, en crear el primer cómic dedicado a Federico García Lorca, que relata diferentes momentos de la vida del poeta a través de las personas que le conocieron.

La premisa de este cómic es construir diferentes relatos biográficos con cierta independencia; son doce miradas al poeta en sepia, doce relatos en torno a García Lorca, que sirven para llegar al corazón del lector y hacerle reflexionar sobre la crueldad de la que es capaz el ser humano. También una invitación a disfrutar de la obra de este poeta inolvidable.

Se trata, por lo tanto, de una ficción biográfica, ya que, a partir de anécdotas auténticas, se construyen pequeños relatos en los que recrean los hechos y los diálogos.

Hablar de Lorca sin Lorca es lo que pretenden El Torres y Carlos Hernández al trazar la personalidad del poeta republicano a través de doce capítulos sin orden cronológico, como podrían contarse historias en una tertulia. Desde apuntes del diario del diplomático chileno Carlos Morla Lynch, hasta la última y oscura reunión en la Residencia de Estudiantes entre Dalí y Buñuel, en la que dejaron de lado a su amigo. En la Granada de 1980 conocemos al último pistolero que se jactó de haber matado a Lorca, o la visita a Víznar de cierto investigador irlandés en 1965, acompañado de un sujeto que decía ser el que enterró el cadáver del poeta.

La huella de Lorca es un viaje que comienza en Granada con la historia de la familia del pequeño Alfonsito huyendo de su ciudad natal al estallar la Guerra Civil Española, y acaba con el personaje recorriendo con su hijo las calles de Granada, símbolo de la represión franquista.

Alfonsito es un personaje creado a partir de las vivencias del padre de Carlos Hernández, al que el dibujante sitúa como amigo de Federico y sus sobrinos, como vecinos de la Huerta de San Vicente en 1936.

Pero no todo son sombras. Veremos el típico día de La Barraca en un pueblo segoviano, la impresión que Lorca dejó en unos músicos de Harlem en 1929, la anécdota de las visitas constantes al poeta en un hotel de La Habana… Y visitamos esa Granada actual.

El proceso de documentación ha sido exhaustivo: se han servido de libros biográficos y casi toda su obra en verso y teatro, de modo que pudiera se dotar al álbum del espíritu lorquiano.

En el aspecto gráfico, se han usado una gran cantidad de fotografías de época para recrear la ambientación histórica, así como una amplia selección de retratos de Federico para realizar las ilustraciones que separan cada capítulo.

Carlos Hernández Sánchez (Granada, 1972) colabora con el diario Ideal (que se vende en Granada, Almería y Jaén) desde 1994 y ha participado en varios volúmenes colectivos: Dos Veces Breve, Lagartija Nick (un álbum con tiras inspiradas en sus canciones) y Los Fantasmas del Teatro Calderón de la Barca de Motril. También ha colaborado con la revista El Batracio Amarillo, y ha publicado alguna recopilación de sus tiras de prensa: Chucky, The Greatest Jits.

El Torres (Málaga, 1972) es un editor y guionista que ha colaborado en gran cantidad de publicaciones. También ha estado al frente de varias aventuras editoriales: Megamultimedia, Sulaco Ediciones, Malaka Studio, y Amigo Comics, una compañía española que publica cómics de historietistas españoles en inglés, y solamente en Estados Unidos.



Malaga Hoy