viernes, 23 de febrero de 2018

Espionaje y artes marciales

JAVIER FERNÁNDEZ
21 Febrero, 2018




'MARVEL LIMITED EDITION. SHANG-CHI, 5: TRIUNFOS DE LA CARNE' Doug Moench, Mike Zeck, Gene Day.Panini. 424 pág. 40,95 euros.

Con su extravagante mezcla de espionaje y artes marciales, de acción y lirismo, no resulta exagerado afirmar que la serie Master of Kung Fu figura entre lo mejor que ha publicado Marvel en toda su historia. El quinto volumen de la recuperación de este título de culto en la colección Marvel Limited Edition contiene los números 90 a 106 (1980-81), es decir, los últimos episodios dibujados por Mike Zeck, con tintas de Gene Day, y los primeros dibujados por Day en solitario, siempre con guiones de Doug Moench. Al hacerse cargo de los lápices, Day trajo de nuevo a la serie una sofisticación narrativa que no se veía desde los tiempos de Gulacy. En cuanto a la edición, casi la mitad del tomo permanecía inédito en España y, como viene siendo habitual, se incluyen aquí reproducciones de diversos originales y las páginas de correo de los lectores de la época.

Malaga Hoy

Clásicos modernos

JAVIER FERNÁNDEZ
21 Febrero, 2018





'MARVEL SAGA. DAREDEVIL: EL DOSSIER MURDOCK' Brian Michael Bendis, Alex Maleev.Panini. 160 páginas. 16 euros.

La colección Marvel Saga viene reeditando una selección de los mejores cómics publicados por Marvel en el siglo XXI, títulos emblemáticos que merecen ser atesorados por los aficionados al género de superhéroes.

Entre estos, destaca el Daredevil de Brian Michael Bendis y Alex Maleev, uno de los periodos más aclamados del personaje, solo superado por el de Frank Miller. Esta particular mezcla de género negro y superhéroes, ejemplo prototípico de la narrativa descomprimida de Bendis y del grafismo con base fotográfica de Maleev, comenzó en el número 26 del volumen 2 de Daredevil (2001) y terminó en el número 81 (2006), publicados por el sello Marvel Knights. En total, han sido una decena de tomos de la citada colección Marvel Saga, del 5 al 14, aunque el lector interesado haría bien en agenciarse también el 3, pues contiene un par de aproximaciones previas de Bendis al personaje. El último tomo se titula El dossier Murdock y contiene la saga homónima en seis partes, que narra el enésimo retorno de Wilson Fisk y la inesperada conclusión a la trama de la identidad secreta de Daredevil, que se hizo pública en los primeros compases de la etapa. Aviso de que Bendis le pasó el testigo a un gran Ed Brubaker, de modo que los siguientes volúmenes son igualmente recomendables.

También en Marvel Saga se está recuperando El Castigador de Garth Ennis, más concretamente los episodios publicados por el sello MAX, de 2003 en adelante. Ennis ya había tenido ocasión de divertirse anteriormente con el personaje, pero lo refinó aún más en esta versión, alejándolo de los tópicos superheroicos. Como es natural, el Castigador sigue siendo un vigilante obsesionado con la venganza, un homicida metódico y sanguinario enfrentado a los criminales, pero lo que cambia aquí es el tono, que se vuelve harboiled, duro, realista y violentísimo. El último tomo publicado, el 10, contiene los números 43 a 49 (2007), todos dibujados por Lan Medina, y en él, el protagonista hará frente a las viudas de algunos de los mafiosos que ha asesinado.


Malaga Hoy

viernes, 16 de febrero de 2018

La Generación X

El volumen 0 de 'Odio' es el precedente de 'Los Simpsons', 'South Park' y 'Padre de familia'. El protagonista, Buddy, no tienen ningún interés en llegar a un mundo adulto inestable y precario


GERARDO MACÍAS
14 Febrero, 2018


'Odio integral nº 0: La juventud de Buddy'. Guion y dibujos: Peter Bagge. La Cúpula, 2009.

Se denomina Generación X a una de las consideradas grandes generaciones perdidas de los años noventa del siglo XX: la generación de la pasividad, los hijos de la agitación posmoderna, los padres del escepticismo finisecular.

Dentro del cómic underground, sin duda uno de los principales representantes de la Generación X es Buddy Bradley, personaje creado por el historietista estadounidense Peter Bagge, que protagoniza con gran éxito series como Mundo Idiota, Buddy y los Bradley y Odio.

Parte del éxito se debe sin duda al alto grado de identificación entre el personaje protagonista, el pusilánime pero carismático Buddy Bradley, y el propio historietista, Peter Bagge; un proceso de identificación que el autor consigue trasladar también a sus lectores, que responden en su mayor parte a un arquetipo muy similar al del propio protagonista: un joven de Seattle, New Jersey, a medio camino entre ser un veinteañero y convertirse en treintañero, con mucho miedo a entrar en la madurez y una fuerte animadversión a adquirir las responsabilidades que ésta conlleva.

Movido por el afán de profundizar en su más célebre creación, Bagge creó la serie Buddy y los Bradley, ambientada en la juventud de Buddy, que es la que se recopila en este volumen 0, a modo de prólogo de Odio, la serie más conocida de todas las que protagoniza Buddy.

El autor refleja a lo largo de las casi doscientas páginas del volumen las constantes del personaje central que luego se fortalecerán en sus desventuras como adulto: sus frustrados intentos de integración social, su afición por la música de épocas pasadas (principalmente, el rock de los años setenta) y, sobre todo, su rechazo a entrar en un mundo adulto caracterizado por la independencia y la autogestión económica... pero en el que acabará entrando ante la imposibilidad de seguir soportando la situación familiar.

A priori, puede considerarse que los Bradley son un claro antecedente de Los Simpson, ya que son una familia disfuncional formada por unos padres con todos los vicios de unos malos progenitores, y sus tres retoños: Babs, la hija adolescente que quedará embarazada antes de terminar el instituto; Butch, el benjamín, fascista, violento y con una incipiente tendencia al alcoholismo; y Buddy, el primogénito, tosco representante de la juventud de los primeros noventa, marcada por la desidia vital, la precariedad laboral, la inestabilidad emocional, el gusto por la cultura popular y su mala relación con la familia. Pero Odio va más allá, y es precedente además del humor gamberro de teleseries como South Park o Padre de familia.

Al final de este volumen 0, Buddy se independiza, siendo ese el punto de arranque de Odio como serie regular, con el traslado de su protagonista de New Jersey a Seattle, la capital del grunge, tan relacionado con la Generación X.

La familia Bradley volverá a mediados de la serie regular, cuando el protagonista se traslade de nuevo a vivir a la casa paterna, cuyos habitantes se convertirán en secundarios recurrentes. Todos ellos conformarán la vida de Buddy desde sus inicios como adolescente con desgana hacia las responsabilidades que requiere el mundo de los adultos, hasta su progresiva inclusión en el mismo a medida que las circunstancias, los personajes y las vivencias le vayan abocando definitivamente a él. Excelente relato generacional de la juventud de finales del siglo XX.

Peter Bagge tiene un estilo muy particular, argumentalmente realista pero visualmente exagerado, que consigue la sonrisa del lector ante ciertas situaciones cotidianas que provocan reacciones desaforadas en los personajes, momentos en los que el autor maximiza la gestualidad de los mismos. Hay toda una pléyade de secundarios que funcionan a la perfección, tanto cuando Buddy vive en Seattle, como cuando vuelve a la casa de su familia, enriqueciéndose la historia además con una evolución lógica y coherente.

El cambio progresivo de los personajes se nota en cómo evolucionan interiormente, ya que el propio Buddy poco a poco irá convirtiéndose en el adulto en el que no tiene ganas de convertirse, lo cual no le impedirá salir de la mediocre existencia que le rodea. Ello nos es contado principalmente en tono de comedia, pero con tintes de drama en ocasiones.


Malaga Hoy

Los inicios de Supergirl

JAVIER FERNÁNDEZ
14 Febrero, 2018


'Supergirl: Fuera de lo común'. Mariko Tamaki, Joëlle Jones. ECC. 208 páginas. 20,50 euros.

Afortunadamente, resulta cada vez menos extraño ver un título mainstream en manos de dos autoras. Este es el caso de Supergirl: Fuera de lo común, la miniserie de cuatro números (publicados originalmente en 2017 y recopilados por ECC en un solo volumen) en la que la escritora Mariko Tamaki y la dibujante Joëlle Jones narran los primeros pasos del personaje, al margen de la continuidad del universo DC. El origen extraterrestre de Kara Danvers sirve aquí, en palabras de Tamaki, "para explorar el lado alienígena de los 16 años", y este interesante enfoque hace de Supergirl: Fuera de lo común una de las sorpresas del pasado año, así como un bello homenaje a una de las superheroínas más carismáticas y queridas de la historia.


Malaga Hoy

Festival visual de parodias

JAVIER FERNÁNDEZ
14 Febrero, 2018



'Mad Grandes genios del humor: Wally Wood, 1'. Harvey Kurtzman, Wally Wood. ECC. 80 páginas. 9,95 euros.

Si tuviera que ponerle un pero a Mad Grandes genios del humor: Wally Wood, sería, claro está, su pequeño tamaño, y es que el festival visual de estas páginas merece ser disfrutado en el formato original. Dicho esto, el librito (primero de dos) resulta realmente coqueto y su precio es como para no pensárselo. El trabajo de Wood en la revista Mad, con el enorme Kurtzman a los guiones, es una de las cúspides de la historia del cómic, quizá el conjunto de parodias más influyente que ha habido nunca. Este primer volumen recoge diez divertidísimas historietas, presentadas por primera vez en los números 1 a 10 de la mítica cabecera estadounidense. Están fechadas entre 1952 y 1954, pero bien podrían haberse publicado hoy. Entre ellas, destaca la hilarante batalla entre Superduperman (traducido como Superboboman) y Captain Marbles (el Capitán Mármol).


Malaga Hoy



Finales de etapa

JAVIER FERNÁNDEZ
14 Febrero, 2018


'Wonder Woman: Pasado imperfecto'. John Byrne. ECC. 320 páginas. 30,50 euros.

Pasado imperfecto es el tercer y último tomo de la colección Grandes autores de Wonder Woman dedicado a la etapa del personaje escrita y dibujada por John Byrne en la década de 1990. El libro contiene los números 125 a 136 de Wonder Woman y páginas del Adventure Comics 80-Page Giant 1 y de Speed Force 1, todos con un delicioso sabor clásico. Como nos recuerda Fran San Rafael en su introducción: "John Byrne despidió sus tres años en Wonder Woman con dos sagas extensas que resolvieron los conflictos que Crisis en Tierras Infinitas había provocado en la continuidad de la protagonista. Uno de ellos era la ausencia de la heroína en la encarnación original de la Sociedad de la Justicia de América"; el otro "era la identidad de Donna Troy, la primera Wonder Girl". Además de Byrne, asoma brevemente el dibujante británico Phil Winslade, así como Steve Lightle y el gran José Luis García-López, estos últimos como portadistas.


También acaba de concluir la recuperación de otra renombrada etapa del personaje, la de Phil Jiménez en los primeros años del siglo XXI, que casualmente también se ha completado en tres álbumes de la colección Grandes autores de Wonder Woman. La tierra de los perdidos es el título del último de ellos, y van aquí los números 178 a 188 de Wonder Woman, más un especial anterior Wonder Woman: Donna Troy (1998). Gabriel Rearte y un estupendo Roy Allan Martínez se suman a Jiménez en el tablero de dibujo y Adam Hughes sigue deleitándonos con sus espectaculares cubiertas. Entre los atractivos del volumen está el número 188, el suave y apreciado final de temporada, en la onda de los episodios característicos de George Pérez.

Y ya que hablo de Pérez, les recuerdo que sigue adelante la reedición de su seminal trabajo en la década de 1980, del que se derivan las interpretaciones modernas del personaje. El tercer tomo de la etapa se titula Secretos en la arena (números 25 a 35 de Wonder Woman), y, por desgracia, Pérez cede el apartado artístico a Chris Marrinan, aunque, eso sí, se encarga de los guiones.


Malaga Hoy


El gran queso rojo

El volumen presenta una selección de aventuras de Shazam, la mayoría fechadas de 1970 en adelante, además del histórico debut del personaje


JAVIER FERNÁNDEZ
14 Febrero, 2018


'Whiz Comics (1940-2016): 75 Años de Shazam'. VVAA. ECC. 248 páginas. 25 euros.

El superhéroe conocido hoy como Shazam debutó en 1940, con el nombre de Capitán Marvel, en el número 2 (no hubo número 1) de la cabecera Whiz Comics publicada por la editorial Fawcett. El niño Billy Batson, un humilde repartidor de periódicos, es conducido hasta el metro por un desconocido, se sube a un extraño vagón, "con luces que refulgen como ojos de dragón", y acaba en la cueva del viejo mago Shazam, que lleva 3.000 años luchando contra la maldad. Momentos antes de que le caiga encima un enorme bloque de granito, el mago confiere a Batson la sabiduría de Salomón, la fuerza de Hércules, la resistencia de Atlas, el poder de Zeus, el coraje de Aquiles y la velocidad de Mercurio, nombres cuyas iniciales conforman la palabra Shazam. Cada vez que Billy Batson la pronuncia en voz alta, se transforma en el fornido Capitán Marvel, un adulto de traje rojo, capa blanca, adornos dorados y rayo en el pecho. Y a la inversa, si el Capitán Marvel dice Shazam, el que retorna es Billy Batson. El escritor Bill Parker y el dibujante C. C. Beck fueron los encargados de narrar tan imaginativo comienzo.

Con el Capitán Marvel, también conocido con el apodo del Gran Queso Rojo, los editores pretendían emular el éxito de Superman, y vaya si lo consiguieron. En cuestión de meses, sus ventas superaron las del héroe de DC y se situaron por encima del millón de ejemplares. Pronto, el universo del Capitán Marvel se amplió con personajes como Capitán Marvel Jr., Mary Marvel o Hoppy, una versión a lo funny animal, que conformaron lo que se conoce como la familia Marvel. El mejor guionista de la franquicia fue el prolífico Otto Binder, que llegó en 1942 y firmó más del 50% de las historietas del personaje en la Edad de Oro. La química entre Binder y Beck fue total, y la revista The Comics Journal escogió en 1999 el trabajo de ambos como uno de los cien mejores cómics del siglo XX.

Ya sabrán que DC demandó a Fawcett por plagio y ambas editoriales se pasaron litigando una década y media hasta que, en 1953, con el género de superhéroes en franco declive, alcanzaron un acuerdo. Fawcett indemnizó a DC y canceló las distintas series del personaje. A continuación, DC contrató a los principales artistas del Capitán Marvel (con la notable excepción de Beck) y los puso a trabajar en Superman, al tiempo que ampliaba el imaginario del krytoniano con otros conceptos derivados, al estilo de la familia Marvel. Irónicamente, en la década de 1970, DC adquirió los derechos del Capitán Marvel y lo incorporó a su universo, renombrándolo como Shazam, pues la vieja marca había sido registrada ahora por la editorial Marvel.

El volumen 75 años de Shazam presenta una selección de aventuras del personaje, la gran mayoría fechadas de 1970 en adelante, con una impresionante nómina de autores como Geoff Johns, Gary Frank, Grant Morrison, Roy Thomas, Gil Kane o Jerry Ordway. Va también el histórico debut del personaje, y esa joya de quince páginas que es la primera historieta de la familia Marvel, firmada por Binder y Beck en 1945.


Malaga Hoy