La vida del protagonista de esta historia cambiará radicalmente desde el momento en el que alguien llame a su puerta
José Luis Vidal
28 de septiembre 2024
Radovan ha vivido siempre bajo la sombra de su padre, el famoso autor de cómics Tomislav Brandt. En su país es una auténtica celebridad, conocido por haber sido el 'padre' de Texas Kid, un personaje que ha calado hondo en los lectores.
Texas Kid, mi hermano
Autores: Darko Macan, Igor Kordej
Tapa dura
Color
224 págs.
30 euros
ECC Ediciones
Lo que la mayoría de la gente no sabe es que Tomislav es un tipo huraño, y que de puertas para dentro de su hogar, tanto su hijo como su esposa han tenido que soportar infinidad de maltratos, tanto físicos como psicológicos.
En un viaje al pasado, conoceremos al Tomislav niño, que atraviesa un auténtico infierno de palizas, debido a su carácter y, pasados los años y su experiencia en el conflicto bélico, encontrará el camino a seguir dibujando cómics.
Pero esta historia da un vuelco cuando Radovan, un chico que ha elegido la rebeldía como arma para con ello llamar la atención de su padre, que se ha pasado media vida frente al tablero de dibujo, imaginando aventuras protagonizadas por el chulesco cowboy.
Y es precisamente a éste al que el joven se encuentra al abrir la puerta…
A partir de ahí la historia toma un derrotero diferente, ya que este 'hijo pródigo' tan hábil con la pistola como con la lengua o cabalgando a su fiel Lucky, hará que todos y todas caigan embelesados ante sus encantos y, sobre todo, y es lo que más duele a Radovan, defendido en todo por su padre y creador, que nunca se había mostrado tan orgulloso por nadie.
Será entonces cuando en la mente del joven empiece a esbozarse un plan, una fijación, cuya guinda para el imaginario pastel serán dos hechos: la inesperada y desconocida confesión de su propia madre y una traición.
Pero, ¿se puede matar a un personaje nacido de la ficción?
Personalmente, descubrí al croata Igor Kordej, el autor de este increíble cómic, entre las páginas de la mítica revista de cómic 1984, publicada por Josep Toutain, y ya solo con su estilo de dibujo, tan diferente y expresivo, llamó mi atención. Y no solo ésta era una de sus cualidades como artista, sino que narraba visualmente como un auténtico maestro, hecho éste que podéis corroborar disfrutando de este Texas Kid, mi hermano, donde partiendo de un relato de su viejo compañero en esto de los cómics, Darko Macan, crea una obra que, además de engancharte con su argumento, puede utilizarse como herramienta didáctica, ya que en este caso, como el propio Kordej comenta en el epílogo, ha querido probar con una narrativa cercana al manga japonés en algunos momentos de la trama, logrando con ello unas secuencias donde la violencia se convierte en algo totalmente bello.
En España hemos tenido la suerte de poder seguir y disfrutar de su extensa obra, ya sea la producida para el mercado europeo, así como su paso (traumático, como ha confesado en alguna entrevista) por la Casa de las Ideas norteamericana (Soldier X). En el catálogo de ECC Ediciones podemos encontrar algunos de sus últimos trabajos, como Cold & Pepper, La historia oculta, Imperio o Marshall Bass.
Diario de Cádiz
No hay comentarios:
Publicar un comentario