Jan, creador de Superlópez, rechaza la Medalla al Mérito en Bellas Artes, y el francés Jacques Tardi, la Legión de Honor
GREGORIO BELINCHÓN Madrid 3 ENE 2013
Jan, en el Salón del Cómic de Barcelona en 2002. / SUSANNA SÁENZ
El asunto ha pasado bastante inadvertido entre las despedidas de un año y las bienvenidas al siguiente, pero dos comiqueros —sin ponerse de acuerdo, obviamente— se han levantado en pie de guerra contra el establishment justo cuando los sacrosantos guardianes oficiales de la cultura empezaban a igualar a los autores de tebeos con el resto de los artistas.
El pasado 28 de diciembre, el Consejo de Ministros concedió las medallas de Oro al Mérito en las Bellas Artes a un puñado de creadores, entre ellos Juan López, Jan (Toral de los Vados, León, 1939), creador sobre todo, o ante todo, de Superlópez. El lunes 31, a media mañana, Jan envió este comunicado: “Quiero expresar mi agradecimiento ante las muchas felicitaciones que me han llegado y, también, disculparme por haber provocado tantas expectativas entre colegas y amigos, y sobre todo, entre mis paisanos de Toral. Hubiera preferido que me lo preguntaran primero, pero ante las circunstancias sociales y políticas actuales no puedo, por ética personal, aceptar la Medalla de Oro al Mérito en Bellas Artes que, según he sabido por la prensa, me concede el Ministerio de Cultura de España, de lo que todavía estoy esperando una confirmación oficial para actuar en consecuencia. Siempre he intentado sentirme bien conmigo mismo, y para ello debo actuar lo más ceñido posible a mis convicciones. Saludos y un abrazo muy solidario para todos”.
Este periódico ha intentado infructuosamente ponerse en contacto con Jan para que explicara esas “circunstancias sociales y políticas actuales”. Jan, autor de Superlópez —su creación más conocida, pero no la única—, otro de los dibujantes nacidos en Ediciones Bruguera, y que en los últimos tiempos ha llevado al tebeo a Tadeo Jones —el personaje de Enrique Gato que ha protagonizado la tercera película más taquillera en España en 2012—, ha recibido otros galardones como el Gran Premio del Salón del Cómic de Barcelona, por su trayectoria profesional, en 2002.
Reproducción del libro 'Fue la guerra de las trincheras (1914-1918)', del dibujante Jacques Tardi. / EL PAÍS
Cuando en el mundo del tebeo español se comentaba el comunicado de Jan, desde Francia llegaba una renuncia parecida. El primer día del año, el Gobierno francés hacía pública en el Journal Officiel la lista de los 681 posibles galardonados con la Legión de Honor. Ayer, uno de esos 681, el dibujante Jacques Tardi, uno de los santones del cómic europeo, rechazó la máxima distinción que se otorga en Francia, por no querer “recibir nada, ni del poder actual ni de ningún otro poder político cualquiera que este sea”. Tardi dejaba claro que para su decisión le daba igual el color del Gobierno. En caulquier caso, estar en la lista no significa recibir automáticamente la Legión de Honor. Según aclaró a la agencia Efe un portavoz de la Gran Cancillería de la Legión de Honor, para que la promoción sea realmente efectiva es preciso ser condecorado por una personalidad que ya haya sido galardonada antes con esta distinción y la única persona que puede organizar y costear dicha ceremonia es el interesado. Así que el decreto solo entra en vigor “a partir de la fecha de la recepción en su grado” y puede haber “múltiples razones”. Tardi se ha centrado sobre todo en la I Guerra Mundial, con obras como Fue la guerra de las trincheras (1914-1918) o ¡Puta guerra!. Su último álbum es Moi René Tardi, prisonnier de guerre au Stalag II B, en la que explora la vida de su padre, militar de carrera que dejó el Ejército tras los horrores de la II Guerra Mundial.
El Pais 03 de enero de 2013
No hay comentarios:
Publicar un comentario