jueves, 15 de agosto de 2019

Spiderman se presenta

Marvel retoma a través de las series 'Marvel Gold' y 'Marvel Limited Edition' tiras de éxito del siglo XX, entre los que se encuentra el tomo de Killraven


JAVIER FERNÁNDEZ
14 Agosto, 2019


'Marvel en los años 60: Spiderman en el universo Marvel'. VV. AA. Panini. 256 págs. 25 euros


Cuando se considera atentamente la creación del universo Marvel en la década de 1960, dos son los hitos creativos que brillan por encima de todo lo demás: Los Cuatros Fantásticos, de Stan Lee y Jack Kirby, y El asombroso Spiderman, de Lee y Steve Ditko. Y claro está que la labor de Kirby es asombrosa, una lección en materia de narratividad y un derroche creativo sin parangón en la historia del cómic, pero uno acaba pensando que, con todo, quizá Marvel no habría triunfado como lo hizo si no hubiese sido por Spiderman. Con su tonto desenfado y su carácter paródico, opuestos a la grandiosidad y la épica de Kirby e interpretado a las mil maravillas por Ditko, el Hombre Araña dejó su huella indeleble en el género, remando a favor de una corriente irónica que ya contaba con un monumento como el Superman de la era Weisinger y que pronto se convertiría en un fenómeno sociocultural gracias a la serie televisiva de Batman. Dicho de otro modo, cuando el camp conquistó los hogares estadounidenses, Marvel contaba entre sus filas con el personaje más torpe y entrañable de cuantos aspiraban al mainstream, el superhéroe adolescente por excelencia. Y algo hizo clic.

La editorial neoyorkina viene repasando su historia en su 80 aniversario con la colección Décadas, compuesta por volúmenes antológicos centrados en las distintas etapas que la conforman. De estos, estaba claro que el dedicado a los años 60 iba a ser especialmente significativo, pues fue entonces cuando se fraguó lo que hoy llamamos universo Marvel. No por casualidad, el presente tomo está centrado en la llegada de Spiderman y su interrelación con los demás personajes de la editorial, un hecho que es así considerado lo más representativo de su tiempo. Décadas. Marvel en los 60: Spiderman en el universo Marvel recopila los cruces del Hombre Araña con los Cuatro Fantásticos, los Vengadores, la Patrulla-X, el Doctor Extraño, Daredevil, etcétera, etcétera. Son el número 16 y los anuales 2 y 3 de The Amazing Spider-Man, el anual 2 de Strange Tales, el número 11 de The Avengers, el 16, 17 y 27 de Daredevil, el 35 de The X-Men, el 73 de Fantastic Four y material de los números 1, 8 y 14 de The Amazing Spider-Man, del primer anual de Fantastic Four y del número 57 de Tales to Astonish. Doscientas cincuenta y seis maravillosas páginas firmadas por los constructores de Marvel, Lee, Ditko y Kirby, junto con otros nombres propios de la compañía como Roy Thomas, Don Heck, Gene Colan y John Romita.




Y hablando de Décadas, está también en librerías el tomo dedicado a los años 70, una pasada titulada La legión de los monstruos, con hermosa portada de Neal Adams. Le toca el turno aquí a uno de los motivos recurrentes en la compañía durante aquellos años, los monstruos. Seres grotescos como el Hombre-Cosa, Drácula, Frankenstein, Morbius o el Motorista Fantasma inundaron por aquel entonces las páginas de Marvel, y vienen a ser una especie de gozosa evolución de sus proverbiales "héroes con problemas", santo y seña de la compañía de cómics.


Malaga Hoy

El cuadrado de la hipotenusa es igual a la suma de los cuadrados de los catetos

'Pitagorín' (1966) es una serie de historietas de su protagonista homónimo, creados por José Peñarroya en la Editorial Bruguera, que cuenta las tribulaciones de un niño superdotado


GERARDO MACÍAS
14 Agosto, 2019




Pitágoras de Samos fue un matemático griego, fundador del movimiento filosófico y religioso llamado pitagorismo, nacido alrededor del año 570 antes de Cristo. A Pitágoras se le atribuyen muchos descubrimientos matemáticos, entre los que se incluye su famoso Teorema de Pitágoras. No obstante, también hizo muchos descubrimientos en disciplinas tales como la música, la astronomía y la medicina.

El nombre de Pitágoras ha calado muy hondo en la cultura popular, especialmente en el ámbito educativo, ya sea de forma despectiva o elogiosa, como sinónimo de empollón o de inteligente.


Precisamente, de Pitágoras deriva el nombre de Pitagorín, último personaje que el historietista José Peñarroya creó para Editorial Bruguera. Pitagorín nació en la serie homónima, que presenta las tribulaciones cotidianas de un niño prodigio de diez años, un superdotado, en el semanario Pulgarcito nº 1.836 (1966). Pitagorín se publicó en revistas de Editorial Bruguera, como Súper Pulgarcito, Mortadelo Especial, Copito y Súper Cataplasma durante los setenta.

La serie narra las andanzas de un niño inventor, de buen corazón, que trata siempre de ayudar a los demás. Gracias a sus conocimientos científicos y a su condición de superdotado, todo lo que se propone le sale bien. Pero no siempre tienen éxito sus invenciones, porque el objetivo con el que son creadas se desvirtúa o no resultan tan beneficiosas como se piensa en principio.

El aspecto físico de Pitagorín no deja lugar a dudas: rubio, siempre bien peinado, con lazo al cuello y gafas con gruesos cristales que tapan sus ojos. Peñarroya crea un personaje de humor totalmente blanco, que pasa la estricta censura de la época.

Pitagorín vive con sus padres, cuyo papel es testimonial en la serie. Tanto es así, que el padre va cambiando de aspecto sin que se haga la menor mención. Pitagorín va al colegio aunque no lo necesita. Es la antítesis de los niños de los tebeos de la época. Trata de llevar una vida normal, tiene un carácter humilde y educado. Pitagorín siempre pone su inteligencia al servicio del prójimo.

La inteligencia de Pitagorín traspasa las habilidades propias de cualquier niño de su edad, y también la de cualquier adulto, inventando mil artilugios que suele utilizar para ayudar a sus semejantes y a veces para impartir justicia. Sus hallazgos le valen un montón de honores que no suele aceptar, pues tiene que ir al colegio, o está ocupado jugando.

Pitagorín suele ir acompañado de un chaval de su edad con el pelo cortado a tazón, Pepito, aunque alguna vez se ha asociado también con otros niños como Luisito o la niña Merceditas.

Pitagorín tiene su némesis en Pepón, un niño de su misma edad, algo más corpulento, mal peinado, vestido con pantalones de un solo tirante, y aspecto gandul. Siempre acaba rindiéndose ante la superioridad de su rival, e incluso agradeciendo la lección.

Este libro contiene antologías de otros personajes de Bruguera caracterizados, como Pitagorín, por su inocencia: Las tremebundas fazañas de Don Furcio Buscabollos (1947), de Guillermo Cifré; La vida adormilada de Morfeo Pérez (1952), de Carlos Conti; Doña Trini y sus animalitos (1959), de José Escobar; Don Óptimo (1964), de José Escobar; Heliodoro Hipotenuso (1948), de Manuel Vázquez; Ángel Siseñor (1953), de Manuel Vázquez; La abuelita Paz (1969), de Manuel Vázquez; Feliciano (1969), de Manuel Vázquez; Robín Robot (1972), de José Sanchís; y Roquita (1979), de Jordi Gosset.

José Peñarroya (Castellón, 1910-Barcelona, 1975) fue un historietista de la Escuela Bruguera. Fue uno de los cinco grandes pilares de la editorial en los años cincuenta, junto a Cifré, Conti, Escobar y Giner. La familia Peñarroya se trasladó a Barcelona cuando él contaba con dos años de edad. En 1942, se ofreció para trabajar en dibujos animados, donde conoció a otros dibujantes con los que trabajó en 1947 para Bruguera. En 1957, Peñarroya se independizó, junto a los otros cuatro pilares de Editorial Bruguera, para crear la revista Tío Vivo. Durante la siguiente década trabajó en varias revistas de Bruguera. Las series más populares de José Peñarroya fueron: Don Pío, Gordito Relleno, Pepe el Hincha, Pitagorín y Don Berrinche.



Malaga Hoy

Páginas con polémica

JAVIER FERNÁNDEZ
14 Agosto, 2019

'El asombroso Spiderman, 38: El último deseo'. Dan Slott, Humberto Ramos, Giuseppe Camuncoli. Panini. 248 páginas. 253euros.

El trigésimo octavo recopilatorio de Spiderman en la colección Marvel Saga ofrece uno de los momentos más dramáticos y polémicos en la trayectoria del Hombre Araña, cargada de por sí de momentos dramáticos y polémicos. Este enfrentamiento con el Doctor Octopus cambió por sorpresa el statu quo de la serie y generó una airada reacción por parte de los lectores, muchos de los cuales juraron no volver a comprar un tebeo más de Spiderman, pero volvieron corriendo cuando se dieron cuenta de la jugada maestra que había diseñado Dan Slott. El último deseo es la antesala de Spiderman Superior. Son los números 695 a 799 de The Amazing Spider-Man y el Avenging Spider-Man 15.1.



Malaga Hoy

viernes, 9 de agosto de 2019

“Los autores de cómic debemos dar la batalla por el libro de papel”

La inglesa Isabel Greenberg y el francés David Sala repasan los desafíos de la historieta en un mundo invadido por las pantallas

SONIA VIZOSO
A Coruña 8 AGO 2019

Isabel Greenberg y David Sala, este miércoles junto al Kiosco Alfonso de A Coruña. ÓSCAR CORRAL

Ella tiene 31 años y con solo dos obras ya es una exitosa autora de novela gráfica en un país, Reino Unido, sin gran tradición en el arte de la historieta. Él nació hace 46 y lleva dos décadas triunfando en Francia, meca europea de la viñeta. Y ambos, Isabel Greenberg y David Sala, habitantes de un planeta invadido cada vez más por las pantallas, coinciden en que sin libro de papel no hay cómic. “Me interesan las posibilidades de la tecnología para incorporar sonido o movimiento, pero eso ya no es una novela gráfica, es otra cosa”, apunta Greenberg. “Los autores y la sociedad deberíamos dar la batalla para defender el libro, el trabajo en papel. La supervivencia de este medio tan rico pasa por que los adultos les enseñemos a los más pequeños las capacidades que tiene”, añade Sala.

Greenberg y Sala son dos de las figuras que han aterrizado esta semana en A Coruña para participar en la 22º edición del salón Viñetas desde o Atlántico, la gran feria de la historieta que promueve el ilustrador gallego Miguelanxo Prado todos los meses de agosto desde 1998. No se conocían en persona pero EL PAÍS los ha reunido para dibujar los desafíos que afronta un oficio por el que confiesan haberse sentido atraídos desde que eran niños.

Sala sostiene que el cómic “está mucho más valorado hoy” que cuando él empezó, y ha ganado peso en las escuelas de arte: “Estamos en el buen camino”. Los jóvenes caen en brazos cada vez más de esta disciplina, como autores y como lectores, concuerda Greenberg, pero alerta del “peligro” de que “se convierta solo en un acercamiento visual y que se olviden de la narrativa”. Sala se muestra optimista: “El cómic puede coexistir con los vídeos o los videojuegos porque es un medio rico que sigue creciendo y que tiene todas las posibilidades para sobrevivir”.

Su promoción en las aulas, insisten ambos, es la tabla de salvación. Greenberg señala que en Reino Unido el "respeto" y la afición a los cómics está creciendo pero "ayudaría mucho que se incluyera en los currículos escolares". "En mi país está considerado más un género que un medio para transmitir", lamenta. "En las tiendas de libros están todos [los cómics] juntos, los de superhéroes al lado de las biografías, por ejemplo. No tiene sentido, un cómic sobre [una obra de Stefan] Zweig debería estar con todo lo de ese autor".

El ejemplo puesto por Greenberg se refiere a la obra más aclamada de Sala, publicada en 2017: la adaptación al cómic de El jugador de ajedrez, el grito contra el nazismo que escribió en 1941 el escritor austríaco Stefan Zweig antes de suicidarse junto a su esposa en Brasil. El dibujante francés cuenta que en este trabajo fue donde comprobó las amplias posibilidades expresivas del cómic, ya que fue capaz de encontrar en las viñetas “respuestas narrativas a problemas literarios”.

Se perciben movimientos tectónicos en la base del sector que la industria aún no refleja. Greenberg, que con Las cien noches de Hero le dio la vuelta en 2017 al elenco tradicional de personajes femeninos dominado por princesas guapas y estúpidas, imparte clases de ilustración con un 90% de alumnas y dice codearse habitualmente con colegas de ambos sexos. Esos avances en paridad, recuerda Sala, no impidieron que en 2016 el festival más prestigioso de Europa, el de Angulema, presentara una lista de 30 nominados en la que no había ni una sola mujer. Tuvo que dar marcha atrás ante el escándalo.

Tanto Greenberg como Sala darán un giro a su travesía por el universo del cómic con sus próximas obras. La británica ya la tiene terminada, pero todavía no la ha podido acariciar con sus manos. Y lo está deseando. Tras sus dos primeras creaciones sobre mitos y leyendas, esta vez aborda una historia basada en hechos reales: la infancia de las hermanas Brrontë y el mundo imaginario que ellas inventaron. “Es mi libro más ambicioso tanto desde el punto de vista narrativo como gráfico”, avanza.

Sala tiene en mente “un proyecto aterrador”, según sus palabras. Se adentrará en la creación autobiográfica, relatando la huida de sus abuelos españoles de la dictadura franquista: “Tengo ganas de contar esta historia, pero confieso que me genera mucho respeto”.


El Pais

EN POCAS PALABRAS: Miquelanxo Prado

El historietista dirige el salón Viñetas desde o Atlántico, que se celebra esta semana en Galicia

BABELIA
7 AGO 2019


Miguelanxo Prado: “El cómic se ha hecho mayor”
ILUSTRACIÓN DE SETANTA

Miguelanxo Prado (A Coruña, 1958) es uno de los historietistas españoles más sólidos y reconocidos. Ganador del Premio Nacional de Cómic 2012 por su obra Ardalén, dirige desde su creación el salón Viñetas desde o Atlántico, que se celebra todos los meses de agosto en A Coruña desde 1998. La edición de este año, que empieza el próximo lunes, rinde homenaje a Tintín.


¿Qué le llevó a la historieta? La fascinación por el dibujo, la pintura y la narrativa. En definitiva, ser consciente de que podía contar historias con imágenes.

¿Cuál es el último título de cómic que le ha impresionado? Pinturas de guerra, de Ángel de la Calle.

¿Su personaje favorito de todos los tiempos? En esta pregunta suspendo… Son personajes con los que entablé relación ya como adulto, y no hay tanta pasión como para enamorarte de uno solo. Calvin & Hobbes podría servir.

¿Qué obra ajena le gustaría haber firmado? Píldoras azules, de Frederik Peeters.

¿Qué obra literaria le gustaría convertir en viñetas? Difícil escoger solo una… Cuando el viejo Sinbad vuelva a las islas, de Álvaro Cunqueiro, podría ser una.

¿Algún tipo de cómic que no le guste o incluso aborrezca? Puede no gustarme y supongo que podría llegar a aborrecer una obra en concreto, pero jamás “un tipo” de cómic.

Dirige el salón Viñetas desde o Atlántico desde su creación en 1998. ¿En qué ha cambiado esencialmente el cómic en todo este tiempo? Nos hemos hecho mayores como medio, hemos perdido la pujanza del primer siglo de vida, pero nos hemos librado de muchas de sus limitaciones. Creativamente, estupendo; económicamente, para los autores, más apretado.

¿Y cómo ve el futuro? Inevitable. Las mutaciones son constantes. Mejor preocuparnos de manejar correctamente el presente. Vale… Soy de natural optimista.

Recomiéndenos una película de animación. ¡Qué manía con el “una”! Los diez primeros minutos de Up, Coco, El viaje de Chihiro, 101 dálmatas… Cuatro “unas” por el mismo precio.

¿Qué canción escogería como autorretrato? Blackbird, de los Beatles. Me hubiese gustado que alguien hubiese hecho el equivalente al Mediterráneo de Serrat con el Atlántico.

¿Qué está socialmente sobrevalorado? Lo “más”. Lo más vendido, lo más nuevo, lo más retuiteado, lo más grande…

¿A quién le daría el Premio Nacional de Cómic?
A quien firme la mejor obra del año. Las bases del premio son claras. No es un premio por los servicios prestados. Si un desconocido publica la mejor obra del año a juicio del jurado, se lleva el premio. Si un autor incuestionable, de los que han hecho grande el medio, ese año no publica una obra mejor que la del recién llegado, no se lo lleva. El premio busca promocionar el medio, no ser una medalla al mérito.


EL Pais



De la web al papel... y a los dibujos animados

'One Punch-Man' (2012), de One y Yusuke Murata, es un manga que cuenta la historia de un superhéroe muy fuerte, que se muestra abrumado por la ausencia de un verdadero desafío


GERARDO MACÍAS
07 Agosto, 2019

'One Punch-Man 01'. Guion: One. Dibujos: Yusuke Murata. Editorial Ivrea, 2016.

En el año 2009, debuta en Japón un webcomic que rápidamente tuvo mucho éxito pese a su tosco aspecto. Su título era One-Punch Man. Cuatro años más tarde, el reconocido mangaka Yusuke Murata contactó con ONE, autor del webcomic original, para proponerle una serialización en otra web, totalmente redibujada por él. El proyecto atrajo el interés de la gran editorial Shueisha, que albergó la serie redibujada entre sus páginas digitales. El dibujo original era amateur, pero Yusuke Murata se las arregla para rehacer la historia, y el resultado son unas viñetas sin duda espectaculares.

El protagonista de la obra, Saitama, es un hombre de unos veinticinco años de edad, con un físico delgado y estatura y peso promedios. Debido a su condición sobrehumana, Saitama sufre una gran crisis existencial, ya que es demasiado poderoso. Es capaz de derrotar a sus oponentes de un único golpe, por lo que sus batallas las encuentra aburridas. Se registra en la Asociación de Héroes, donde lo bautizan como Calvo con Capa. Tiene asignada la tarea de defender Ciudad-Z contra los Monstruos que aterrorizan al planeta y representan una amenaza para la sociedad.

Saitama lleva una vida totalmente anodina, sin amigos ni novia, cargando en soledad con este don... que quizás sea más bien una maldición. A medida que avanza su historia, iremos conociendo en flashback algunos detalles de su pasado y cómo llegó al estado actual.

Como en muchos manga, el héroe quiere superar sus limitaciones, explorar sus capacidades. Pero Saitama no es un héroe cualquiera: tiene el don de ganar cualquier enemigo con un único golpe. Esto hace que sienta una gran frustración, porque los combates no revisten interés. Busca retos, alguien que le aguante los golpes, aunque siga venciendo a todo el mundo.

Este primer volumen es una presentación del personaje, de la organización enemiga…; pero con un planteamiento lo suficientemente distinto para hacer una lectura atractiva. Crear un personaje que ya posee la fuerza máxima bombardea la estructura básica de este tipo de historias y obliga al protagonista y al autor a buscar alicientes para construir una historia atractiva más allá del ataque del monstruo de turno. Las vicisitudes mentales del protagonista le causan ansiedad por no encontrar a nadie como él.

Los enemigos de Saitama son toda una variada gama de monstruos gigantes que atacan a las distintas ciudades, creando un clima de caos y destrucción a su paso. Nuestro héroe se entera de todo viendo la tele y sale a detener al monstruo en cuestión. No porque realmente quiera hacerlo, sino porque eso es lo que le toca. Los planos con monstruos enmedio de ciudades recuerdan mucho a las películas de Godzilla. También recuerda un poco a las series de manga y de dibujos animados Neon Genesis Evangelion; Mazinger Z; y Ataque a los titanes.

El dibujo es elegante, comercial y con un toque propio. Muy dinámico y claro a la vez, imprimiendo mucha velocidad a la acción. Por cierto, hay que señalar que la historia es bastante gore, en el sentido de que el puñetazo de Saitama atraviesa carne y huesos, y puede destrozar todo el cuerpo o abrir boquetes en el tórax más corpulento. El diseño de los personajes es también muy bueno, especialmente los monstruos que atacan la ciudad. Un aspecto sorprendente es el contraste del dibujo de toda la obra con la simplicidad de trazo con el que está dibujado Saitama, con líneas muy simples y casi ausencia de expresiones faciales.

Como dato curioso, hay que decir que al comienzo, la serie se titulaba en Japón One-Punch Man (El hombre de un sólo puño), y así se imprimieron los primeros tomos de la serie. Pero en cierto momento cambiaron el guion de sitio, quedando One Punch-Man (Un Hombre-Puño). Que se parece mucho pero no es lo mismo; y que es también el título del manga en España.

One Punch-Man es un éxito absoluto que ha llevado al calvo con capa hasta la publicación digital y en papel en los EEUU y ha sido un éxito absoluto en Francia. A finales del año 2015, empezó a emitirse la serie animada por parte de Madhouse, trasladando de forma bastante fiel las aventuras de Saitama. Esta teleserie de dibujos animados se encuentra disponible actualmente en el catálogo de Netflix España.


Malaga Hoy


Enfrentamiento de la naturaleza

JAVIER FERNÁNDEZ
07 Agosto, 2019

'Perrito contra gatito'. Andy Riley. Astiberri. 96 páginas. 10 euros.

El guionista de cine y televisión británico Andy Riley, ganador de un Emmy con la comedia de HBO Veep y conocido en el mundo de las viñetas por la tira semanal Quemados (publicada por The Observer entre 2002 y 2010) o series como la de los conejitos suicidas (El libro de los conejitos suicidas, El regreso de los conejitos suicidas y El amanecer de los conejitos suicidas) o la de las mentiras para niños pequeños (Grandes mentiras para niños pequeños y Muchas más mentiras para niños pequeños), todo ello publicado en España por Astiberri, regresa a librerías con Perrito contra gatito, de nuevo en el catálogo de la editorial vasca. Un gato listo y un perro tonto chocan en estas páginas cargadas de humor negro y eficacia visual.



Malaga Hoy